CONCEPCIÓN DEL URUGUAY
13-02-2008

DRAMAS FAMILIARES DERIVARON EN LESIONADOS DE ARMA BLANCA

Dos hechos de violentas características se registraron en las últimas 24 horas en el departamento Uruguay. En ambos casos se trató de violencia familiar, donde los dramas dejaron como saldo a dos personas mayores lesionadas de arma blanca. Uno de los hechos fue protagonizado por un matrimonio y el restante los actores fueron un menor y su padrastro.
El primer incidente se produjo en horas de la tarde del lunes en la localidad de Santa Anita, situada en la zona noroeste del departamento, distante a más de 80 kilómetros de Concepción del Uruguay. Según lo informado, una mujer mantuvo una fuerte discusión con su concubino José Prediger de 50 años, a quien le asestó una puñalada en el lado izquierdo del abdomen, tras lo cual se dirigió a la dependencia policial de esa localidad, donde dio aviso. El lesionado fue asistido y trasladado a un centro asistencial, tras lo cual se lo derivó al hospital Justo José de Urquiza, donde fue sometido a una intervención quirúrgica, ya que presentaba una lesión de gravedad. En tanto esto sucedía, se daba cuenta a la autoridad judicial en turno, quien dispuso la indagatoria en libertad de la mujer y el secuestro del cuchillo presuntamente usado en el momento del hecho, el cual fue hallado por la Policía en el patio de la vivienda ubicada en inmediaciones de calles Proyectada y Hernández. Según lo señalado, se esperaba la evolución de Prediger, a quien se deberá tomar declaración de lo sucedido.

Arto de los golpes
El otro hecho de sangre se registró en las primeras horas de la mañana de este martes en una vivienda de calle Cabo Primero Pereyra 115, donde un chico de 15 años apuñaló en el cuello a su padrastro de 33.
Fuentes señalaron que la víctima resultó ser Daniel Bidet, quien al momento del hecho –alrededor de las 8.30– se encontraba aparentemente durmiendo, siendo atacado por el menor que le asestó un puntazo que le produjo una grave lesión que demandó su inmediato traslado e internación en el hospital.
Tras el lamentable suceso, el menor se retiró de la casa y se entregó en la comisaría, dando aviso de lo ocurrido, denunciando aparentemente que estaba arto de las golpizas a la que era sometido por la víctima.
Si bien todo se manejó bajo el más estricto silencio, se supo que el chico habría sido examinado por los facultativos, los que habrían corroborado que presentaba signos de golpes. La causa quedó en manos del juzgado de Menores, en tanto que el lesionado se encontraba internado en terapia debido a la delicadeza de la herida, lo que demandó que se le practicara una tomografía computada para evaluar el grado de la misma.
Por Pablo Bianchi De la Redacción de UNO