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POLICIALES
18-05-2011
ABSOLVIERON A CIUDADANO PARAGUAYO ACUSADO DE MATAR A CELSO SIGOT
Carmelo L贸pez Mart铆nez, de 41 a帽os, acusado de dar muerte a pu帽aladas a Celso Horacio Sigot, vecino de Colonia 1潞 de Mayo, en complicidad con Antonio G贸mez Urbine Olivera, fue absuelto por la C谩mara Penal de Concepci贸n del Uruguay por la falta de m茅rito. El fallo fue dado a conocer ayer a los familiares y amigos de la v铆ctima que estuvieron presentes en la Sala de Audiencias del cuarto piso de los Tribunales, a los que se le entreg贸 la sentencia por escrito. Hubo momentos de tensi贸n, nerviosismo y decepci贸n. El acusado recuper贸 su libertad tras 10 meses de estar detenido.
Triste realidad
Cu谩n dif铆cil se hace impartir justicia y, tras un juicio, dejar conforme a las partes, cuando los elementos obrantes en un fr铆o expediente no son lo suficientemente contundentes para llegar a establecer con certeza las responsabilidades. La palabra justicia implica imparcialidad y as铆 deben obrar los jueces, dependiendo del lado que se est茅, para poder entenderla. El hecho de que un acusado, como en este caso, quede libre por la falta de m茅rito al no tener elementos que lo condenen, tambi茅n es justicia, aunque lamentablemente quienes fueron v铆ctimas no lo puedan entender y su dolor sea mucho m谩s poderoso que una fr铆a ley.
Los sucedido ayer fue el ejemplo, cuando la C谩mara uruguayense decidi贸 absolver a Mart铆nez, sobre quien pesaba nada menos que una acusaci贸n por homicidio, pero las pruebas en su contra eran dichos de familiares directos del hombre asesinado y la 煤nica persona ajena que podr铆a haber presentado los cargos en su contra, falleci贸 hace m谩s de un a帽o. Esta persona era nada menos que la pareja de Antonio G贸mez Urbine Olivera, el otro involucrado en el crimen que fuera condenado y se suicidara en Villaguay, tras protagonizar un mot铆n con toma de rehenes en la UP4.
Fue por esta raz贸n que los vocales del Tribunal de La Hist贸rica, no pudieron llegar a la certeza de tener en el banquillo al otro homicida y por esta raz贸n, haciendo justicia que a muchos no les puede conformar, debieron absolverlo por el beneficio de la duda.
Dolor y bronca
Conocida la sentencia, los familiares no pudieron disimular su angustia y enojo, al punto de negarse a retirarse de la Sala, lo que llev贸 a que se solicitara la presencia policial en el hall, a modo de prevenci贸n, mientras el secretario de la C谩mara, doctor Pablo Bur, explicaba pacientemente lo sucedido, tratando de que el estado emocional de la gente no fuera impedimento para que entraran en raz贸n, lo que se logr贸 con mucha paciencia, hasta que lentamente abandonaron la Sala sin incidentes. Tras esta situaci贸n, el hijo del hombre asesinado dialog贸 con el fiscal de C谩mara Diego Young, quien le explic贸 durante largo rato detalles del caso, tras lo cual el hombre se retir贸 llorando junto a sus familiares, sin tener consuelo por lo ocurrido.
Qu茅 pas贸
Mientras esperaba en el hall, Horacio Sigot, hijo de la v铆ctima, dio a UNO detalles de lo ocurrido tras la detenci贸n de Carmelo L贸pez Mart铆nez. 鈥淣osotros supimos que lo hab铆an encontrado en el Paraguay y viajamos inmediatamente para confirmar si se trataba de 茅l.
Cuando llegamos no dijimos que 茅ramos familiares de la v铆ctima y lo entrevistamos. Ni bien entr茅 lo mir茅 a los ojos y le dije que 茅l hab铆a matado un hombre en Entre R铆os. Sin dudarlo me dijo que s铆 y comenz贸 a contar c贸mo ocurri贸 el crimen. Nos dijo que ellos, con Urbine (por Olivera), le hicieron dedo en la ruta y mi padre sigui贸 un poco, pero al conocerlos volvi贸 y los levant贸. Mientras iban en la ruta, Urbine comenz贸 a discutir con mi padre y comenzaron los forcejeos, para luego obligarlo a ponerse en el medio para seguir la marcha. Fue en ese momento que Urbine le produjo un corte en el cuello y mientras peleaban le dio el cuchillo Mart铆nez que lo hiri贸 por la espalda. Luego de eso lo abandonaron en el camino y se fueron caminando para volver luego a llevarse la camioneta鈥, se帽al贸 Sigot, que destac贸 que su padre no muri贸 y qued贸 agonizando.
鈥淵a por la tarde, cont贸 Mart铆nez que Urbine regres贸 en bicicleta y vio que mi padre segu铆a vivo, por lo que lo apu帽al贸 en el coraz贸n y lo arrastr贸 casi 100 metros. Luego intent贸 robar la Ford, pero como no arranc贸 le sac贸 el est茅reo y otros efectos, para finalmente escapar鈥, se帽al贸.
Lamentablemente la pareja de Urbine falleci贸 de c谩ncer y con ella se fue un testimonio vital para corroborar estos dichos, ya que de todo lo que nos dijo Mart铆nez, no hab铆a testigos v谩lidos para el caso, ni de las declaraciones de Mart铆nez, cuya confesi贸n se hizo sin tomar los recaudos necesarios.
Resignaci贸n
Finalmente, Sigot, sus familiares y sus amigos, se retiraron del edificio en silencio y con sus rostros mostrando su desilusi贸n, al estar plenamente seguros de la responsabilidad de Mart铆nez en el hecho, pero convencidos de que lamentablemente los elementos o dichos obtenidos no ten铆an valor judicial para llevarlo a cumplir una condena. 鈥淩ealmente nos duele y da impotencia. Es dif铆cil entender que esto es la Justicia, pero hay que comprender lo que est谩 pasando. Esto hoy nos duele y mucho, pero garantiza que alg煤n d铆a un inocente no pague por algo que no cometi贸. El secretario de la C谩mara puso la cara y explic贸 muy bien y adem谩s comprendi贸 nuestro estado de 谩nimo鈥, se帽al贸 un allegado a la familia. Por otra parte, apuntaron estos errores que los llevaron a este inesperado final, a la falta de previsi贸n del abogado que los represent贸 desde un comienzo.
Fuente: UNO ENTRE RIOS/PABLO BIANCHI