ESPECIAL MUNDIAL SUB 20
20-07-2007

QUE PASE EL QUE SIGUE

(Villa Elisa al Dia)

Clima caliente dentro de la cancha para el choque entre Argentina y Chile por las semifinales del Mundial Sub 20, en Canadá. Se enfrentaban en el National Soccer Stadium de Toronto, donde esperaba República Checa para jugar la final. Y en lo futbolístico, la cosa arrancó con un sonrisa para el equipo de Tocalli. Porque de tres cuartos de cancha hacia adelante, marcaba grandes diferencias y llegaba con claridad. Fundamentalmente por la banda izquierda, a través de Di María, quien había estado en duda hasta último momento.

Así fue que luego de un pase de Piatti, el propio di María encaró por su lateral y metió un tremendo zurdazo al primer palo. La pelota dio en el parante. La respuesta chilena fue un remate de Medina desde afuera del área, que Romero sacó por arriba. Hasta que a los once minutos, Banega trabó en el medio, habilitó al incansable Di María y éste definió con un sablazo infernal, de zurda, que dio en el palo derecho del arquero y se coló: 1-0. Un inicio inmejorable.
Y como si hubiese sido poco, antes del cuarto de hora de juego, Chile se quedó con diez. Medel pegó una dura patada sin pelota y fue expulsado correctamente por el árbitro alemán Stark. La temperatura subía y subía. En inferioridad numérica, los dirigidos por Sulantay pudieron manejar el balón y estuvieron al borde del empate con un zapatazo desde la mitad de la cancha de Cortés. No entró de milagro.
Las caras de perro y la fricción predominaron durante gran parte de ese primer tiempo. Patadas de todos los colores por parte de un seleccionado chileno fuera de control, insultos y mucho roce. Sobre el cierre, Di María casi aumenta. Tocó de derecha luego de un pase de Morales y la sacaron en la línea. Llegó entonces la hora del descanso.
Para jugar la segunda parte, Chile mantuvo esa actitud de ir con todo a todas. Argentina, con calma y autoridad, esperaba y buscaba el momento oportuno para salir de contraataque. A los cinco, Di María, lesionado, fue reemplazado por Matías Sánchez. La Rojita pegaba mucho. El partido estaba cada vez más áspero. Y antes de que promediara el complemento, un vivo y ordenado equipo de Tocalli clavó el 2-0. Moralez desbordó por izquierda, tocó atrás de cachetada y Yacob resolvió de zurda, con cara interna, cruzado. A otra cosa.
No hubo para más. Chile fue a pura impotencia y Argentina defendió la justa victoria con toque, lujos y fútbol. Para completarla, también fue expulsado Currimilla en los trasandinos, que terminaron con nueve y dando una imagen nefasta. La frutilla del postre la puso Moralez y los de Tocalli consiguieron el objetivo sostenidos en estandartes como Banega, Di María y el mismo enganche, y son finalistas. La mala en todo esto es que Cahais y Yacob acumularon dos amarillas y se perderán el choque del domingo. Como en el debut en el torneo, el rival es República Checa. El sueño de repetir el título está a un paso.

por oskarbenites@hotmail.com

foto clarín

Villa Elisa al Día